El autismo y Specialisterne

Unsplash by Daria Nepriakhina

Hoy invito al blog a una empresa muy especial. Su objetivo es crear… hasta un millón de oportunidades de trabajo para las personas con trastornos del espectro autista. Y, además, cambiar la forma en que la sociedad las percibe.

Conoces mi debilidad por quienes corren el riesgo del descarte. Mi empeño en potenciar la igualdad de oportunidades y la inclusión social. En dar visibilidad a quien lo hace. Lo hemos hablado tantas veces en «Dame tres minutos»…

Todo surgió por un niño con autismo y… un amor de padre

Lo confieso: si hace algún tiempo me hubieran mencionado a Thorkil Sonne, o a Specialisterne, me habría sonado a chino…  Pero es danés.

Lo esencial para comprender a Thorkil es Lars, su hijo. Un niño con autismo que hizo que naciera, hace ya más de una década, una empresa social. Lo logró desde su fragilidad -o precisamente por ella- y desde su especial talento -o justamente por él-. Y cómo no, como todas las cosas importantes de la vida, desde el amor. En este caso, un amor de padre.

Por Lars y, sin duda, por su compromiso con todos los Lars del mundo, Thorkil creó Specialisterne. La empresa luego se ha extendido por una quincena de países. España incluida (enlace).

De cómo Lars se las pinta solo y su padre se lía la manta a la cabeza

A la vuelta de un viaje familiar por Alemania, el pequeño Lars (tenía entonces 7 años) cogió papel y lápiz y dibujó en un folio…  sólo 150 cajas; en las que anotó sólo 500 números o letras.

Tras varios días de analizarlo en profundidad (¿qué sería aquello…?), Thorkil hizo un sorprendente descubrimiento respecto a las capacidades de su hijo –luego lo verás- y se lió la manta a la cabeza: dejó su trabajo, rehipotecó su casa y creó Specialisterne.

Con ello daba respuesta a un planteamiento sencillo: “Cada uno de nosotros tiene el poder de decidir: ¿vemos una mala o una buena hierba? En Specialisterne nosotros vemos la buena hierba. Siempre.” La buena hierba era Lars, su diente de león. Lo entenderás.

El diente de león -esa planta que seguro que has soplado hasta hacer volar sus semillas- es todo un símbolo en la empresa. No han elegido una rosa, un tulipán… Han querido escoger la que suele ser considerada, injustamente, una mala hierba. Algunos dicen de ella que es diferente, que rompe la armonía, o incluso cosas peores… Ignoran su potencial en la cocina, la medicina… Lo mucho que nos regala. Para que nadie incurra en el error de despreciar un diente de león, sirve -entre otros muchos- el artículo que va en este enlace.

Déjame presentarte a Francesc

Hace poco tuve la fortuna de conocer a Francesc Sistach, Director General de Specialisterne en España.

Francesc es especialista en poner en valor un talento muy singular: el de muchas personas con trastornos del espectro autista. Trabaja junto con su equipo para formarlas y propiciar, así, que obtengan un puesto de trabajo.

Francesc conoce bien lo que estas personas son capaces de hacer. Y es consciente también de aquello que no saben o no pueden hacer. Pero Francesc nos pregunta a ti y a mí: “Cuando hacéis un currículum, ¿qué explicáis en él, lo que no sabéis hacer o lo que sí que sabéis hacer?”

Yo que, tras culminar mi etapa como consejero de Educación de Navarra, estoy enviando currículos… la verdad es que no he puesto en ninguno que no sé búlgaro; ni resolver integrales y derivadas (se me olvidó, Don Alberto, lo siento). Pongo en el CV lo que sé. Y ya nos advertía Newton –a ver si citándole recupero un poco de prestigio ante los matemáticos- de que “lo que sabemos es una gota de agua; lo que ignoramos es el océano”.

Y hablando de agua: Francesc lo tiene claro. Como el ídem. Hay que poner en valor (y en el CV) lo que sabemos. Que -qué casualidad- es siempre y para todos una gota;  frente al océano por descubrir.

O sea, es la respuesta del diente de león: centrémonos en las potencialidades, en las capacidades de las personas, en lo que pueden aportar.

Si has llegado hasta aquí, tienes premio:

• el vídeo donde Francesc explica todo esto. Lo hace mucho mejor que yo; para eso es el Director General de la compañía y yo… un mero admirador de su tarea, y

• también te dejo un interesante documento (Presentación Specialisterne 2015).

Disfruta el video y el pdf. Hazlo sobre todo pensando en todos los Lars del mundo, en todos sus derechos, en tanto como merecen… en lo mucho que nos dan.

Nos hacen ser mejores. O al menos… intentarlo. ¿A que sí?