Aunque al leer el periódico o al ver el telediario a veces no lo parezca, el mundo está lleno de buenas noticias. Buenas noticias propiciadas por pequeñas acciones de muchas buenas personas. De personas concretas, anónimas, como por ejemplo tú que me lees. Porque las buenas noticias dependen de lo que hagamos cada uno de nosotros. Dependen por ello, también, de ti.
Es verdad que es mucho más «noticiable» -dicen que así lo enseñan en las facultades de Comunicación- lo de «hombre muerde perro» que lo de «perro muerde hombre», pero te aseguro que esto último es más común. Y lo sabes.
De cualquier manera, a base de leer, de ver o escuchar titulares sobre una lóbrega parte de la realidad -que desgraciadamente también existe-, podemos perdernos el brillo, la luz y el color a chorros de tantas acciones buenas, positivas, responsables; llevadas a cabo por personas honestas, esforzadas, competentes y generosas; que son las más. De hombres y mujeres que cada día madrugan para -desde allí donde la vida les ha puesto- intentar hacer su trabajo lo mejor posible, sacar adelante a su familia y servir a la sociedad de la que forman parte.
Y ya es hora de que ocupen los titulares. Hoy quiero brindarles a ellos mi post.
Permitidme, además, una licencia adicional como consejero de Educación del Gobierno de Navarra que fui: dejadme que lo haga, en mi caso, poniendo como ejemplo de buen hacer a tantas familias, a tantos alumnos, a sus profes; a tantos profesionales del ámbito educativo, desde el conserje o la persona encargada de la limpieza al director del centro.
En el trabajo bien hecho de cada uno de ellos, en su actuación responsable, nos jugamos cada día nuestro futuro como sociedad. Y eso sí que son palabras mayores.
En cualquier caso, peques y jóvenes están en buenas manos: en este caso, las de sus familias y las de sus escuelas, además de las del resto de la «tribu»; tribu en la que, como siempre, tienen que ganar los buenos. En ello estamos.
Postdata.- Hablando de educación, el viernes 12 de diciembre José Antonio Marina impartió una conferencia a familias y docentes en el Planetario de Pamplona en la que mencionó un libro que voy a intentar conseguir. Se trata de una obra de Daniel Pennac: «Mal de escuela».
Oye, ¿crees que a alguien le puede ayudar que subrayemos todo lo positivo, lo bueno que hay en nuestra sociedad?
¿Te animas a difundir? ¡Mil gracias!
Dame tres minutos 
Otra buena reflexión. Saludos.
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Mil gracias de nuevo! Saludos!
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Sí,lo»noticiable» es lo que vende, pero es una realidad incompleta.
Como tú bien dices también están los profesionales del ámbito educativo,los alumnos comprometidos con su quehacer estudiantil,las familias y los organismos implicados en obtener nuestra excelencia educativa,son los héroes del silencio, y no me refiero al grupo musical.
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He sido político. Y creo (siempre lo pensé) que hay un exceso de contenidos políticos en los medios. Y de «malas» noticias. Echo de menos noticias en las que los protagonistas (también) lo sean otras personas y entidades. Y contenidos más ilusionantes…
Feliz inicio de semana y gracias por aportar!
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¿Cómo que depende de ti las buenas noticias? porque por ejemplo, en una en la que hay un fallecimiento no lo viven igual un ateo que un creyente.
Otro ejemplo, podría ser en el deporte cuando hay un gran fichaje que parece que va a ser fichado para tu equipo pero sin embargo, es mala para ti porque se va a tu rival.
Otro ejemplo, para algunos puede ser buena noticia que se haya encontrado un nuevo planeta pero para otros les puede parecer absurda porque en vez de buscar vida en otro planeta mejor gastar dinero en ayudar a los países pobres.
¿Eso de hombre muerte perro es una fábula? es que no la conocía y no sé qué significa.
Saludos.
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Querido amigo Gonzalo:
No podemos negar que en el mundo hay malas noticias (que reflejan que hay malas realidades). Muchas salen en los periódicos o en los telediarios.
Pero también existe la posibilidad (y ocurre) de que sucedan cosas buenas. A veces son grandes y a veces pequeñas, pero siempre importantes. Esas palabras amables que diriges a una persona que sufre, un acto de generosidad, una ayuda a los demás, una sonrisa a ese colega tuyo que parece tener un mal día… De ahí para arriba, todo son «buenas noticias» que no suelen salir en los medios de comunicación -a veces sí- y que, en buena medida, dependen de que cada uno de nosotros trabajemos por un mundo mejor. Si vas viendo alguno de mis posts, encontrarás más de una…
Lo de «hombre muerde perro» se suele decir porque -por ser una cosa rara- sería una noticia que se leería mucho más que la contraria «perro muerde hombre» (esto ocurre más, aunque la mayoría de los perros sean buenos y leales).
Cuando quieras, nos tomamos una coca cola o un café y hablamos de esto y de lo que te apetezca. ¡Invito yo!
Un abrazo fuerte
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Muchas gracias por tus aclaraciones.
De acuerdo algún día tendremos que quedar y hablamos.
Vale, tú pagas y muchas gracias por la invitación.
¡¡Abrazo!!
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¡Abrazo, amigo Gonzalo!
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